FELIZ ANIVERSARIO
Ella estaba tumbada sobre la cama, él la miraba con ternura. Encendió las velas, situándolas en lugares estratégicos para dar la luz adecuada y esparció los pétalos de rosas, la flor favorita de ella, por todos los rincones de la habitación. Se inclinó sobre el yaciente cuerpo y la besó con dulzura desmedida en aquellos labios suaves y carnosos. Se acercó al reproductor de música y puso “Te amaré eternamente” que él mismo había compuesto dedicándosela a su único amor: ella. Acarició su rostro y salió. Ella abrió los ojos, había notado su presencia. Todavía tenía entre sus manos la carta escrita por él hacía ahora un año, justo antes de morir, prometiéndole amor eterno. Miró en torno suyo y al ver tanto despliegue lloró. Así celebraron su último aniversario juntos y así lo recordaría para siempre, con velas, pétalos y su canción…
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